17 Ago ? Cómo dar ese look cinematográfico a tus videos
A todos nos ha pasado. Ves una película o un programa de televisión y te soprende un plano increíble. Y piensas que «no puede ser demasiado difícil hacerlo». Configuras la cámara y empiezas a grabar, pero cuando terminas el resultado no se parece en nada a una película de verdad. ¿Qué ha pasado?
En este artículo te explico algunos consejos que puedes emplear para hacer que tus videos parezcan más cinematográficos. Aunque no hay varita mágica que te convertirá en Clint Eastwood de la noche a la mañana, algunos pequeños trucos pueden marcar la diferencia.
1. Piénsa antes de grabar
Una de las cosas más fáciles que puedes hacer antes de empezar a grabar es pensar qué y cómo vas a grabar. Si tomas tu cámara y presionas el botón de rec, es más que probable que no salga bien, reflexiona un poco primero. Antes de empezar a rodar, puedes pensar en el estilo que quieres transmitir ¿Quieres filmar con una profundidad de campo baja y a plena luz del día? En ese caso, necesitarás un filtro ND. Aquí tienes unas recomendaciones de filtros fotográficos que te pueden ser utiles.
¿Vas a usar un trípode o a grabar cámara en mano? ¿Y el sonido: tienes un micrófono o vas a filmar en una zona ruidosa?
Las producciones cinematográficas pasan muchísimo tiempo planeando todo los aspectos técnicos y estéticos. Los equipos de producción hacen todo lo posible para anticipar cualquier problema que se pueda presentar. Los actores saben dónde colocarse, los operadores de cámara saben dónde discurrirá la acción, y todos los demás departamentos trabajan en una sincronía perfecta.
Incluso si acabas de empezar, o sólo estás filmando videos para YouTube, puedes mejorar tus tomas planificándolas de antemano. Enormes YouTubers y bloggers, como Casey Neistat, pueden parecer espontáneos, pero todos sus movimientos los han planificado al detalle, aunque no lo parezca. En televisión la mejor forma de parecer espontáneo es preparándolo antes.
2. Graba en 24 FPS
¿Por qué hacer esto cuando mi cámara puede grabar a mayores tasas de fps?
La gran mayoría de las películas y películas se filman a 24 fps. No sólo se asemeja mucho a la frecuencia de fotogramas con la que se ve el ojo humano, sino que los espectadores cuando van al cine ya están acostumbrados, inconscientemente, a esa velocidad de reproducción. Si grabas a 25, 50 o cualquier otra velocidad de fotogramas que no sea 24, tu video no tendrá esa «fluidez aterciopelada».
Nuestros ojos y cerebro han sido entrenados para esperar 24 fps, a causa de las miles de películas que han visto a través de los años. Si grabas en 24 fps ¡no puedes equivocarte!
3. Añade un recorte cinematográfico (letterbox)
Añadir un recorte cinematográfico es una de las cosas más fáciles que puedes hacer en la fase de postproducción. Es pura magia, automáticamente tu video tendrá ese look cinematográfico del que hablo en este artículo. Las producciones de cine se graban con una relación de aspecto de 2,35:1., en anamórfico. Tú grabarás- a no ser que dispongas de un sofisticado y carísimo objetivo anamórfico- en 16:9, con lo que al recortar la imagen en la edición estarás eliminando píxeles de tu imagen, así que conviene pensar antes el encuadre y dejar márgenes suficientes, arriba y abajo, para no colocar ahí ningún elemento importante de la composición. ¡Cuidado con esto!
Aquí te dejo una reseña de objetivos anamórficos, en caso de que te sobren unos cuantos miles de euros.
4. Ah..la música
La música puede ser crucial en tu película, una buena música puede sublimar una secuencia o, al contrario, un pésimo clip musical puede arruinar todo el video. La música se utiliza en las películas todo el tiempo para llegar a tus emociones. Música clásica en una escena triste, música movida en una escena festiva. Selecciona varias músicas y prueba, prueba y prueba.
Por ejemplo, la escena de los helicópteros en Apocalyse Now ¿sería igual de impactante sin las Valkirias de Wagner de fondo? Ya conoces la respuesta ¿verdad?. Rotundamente, no. Si te dedicas a la producción de videos, encontrar la música acertada puede ser muy frustrante, ya que hay muchas opciones disponibles, pero casi todas de pago. Te dejo aquí un enlace de una plataforma en la que podrás encontrar buena música para tus producciones a precios más que asequibles. Yo es la que utilizo.
5. Qui va piano, va lontano
El movimiento puede transformar tus tomas estáticas y aburridas en animadas y emocionantes. Las producciones cinematográficas gastan grandes fortunas en toda una colección inacabable de dollys, trípodes, jibs, grúas, y gimbals. ¿No puedes gastarte esa fortuna, verdad? Yo tampoco, pero he aprendido que es posible conseguir efectos similares simplemente refelexionando antes de rodar.
Los movimientos lentos, suaves y bien calculados son la clave. Piensa antes los movimiento y grábalos después, con la fluidez con las que los has visualizado. Para eliminar vibraciones existen ya soluciones súper económicas, como el fenomenal, Ronin-S de DJI.
6. Etalonaje siempre que puedas
Corrige el color de tus grabaciones. El color también es capaz de modificar nuestras emociones. ¿Alguna vez ha notado cómo películas como The Matrix se inclinan más hacia el color verde, o cómo las viejas películas del oeste tienen un tinte más amarillento?
Aunque la corrección de color es una profesión en sí misma ( y bien complicada, por cierto), puedes hacer algo al respecto, incluso si no eres ningún experto en la sala de edición.
Para empezar, realiza siempre el balance de blanco cuando estés grabando. Todos los planos que salgan impecables de la cámara luego no deberás retocarlos y eso es tiempo ganado. Y tiempo es dinero.
Tanto FCPx como Adobe Premiere Pro te ofrecen herramientas integradas para corrección de color que son fáciles de utilizar y dan buenos resultados. Aunque, si quieres ir más lejos y quieres pasar horas y horas el «sumum» de los programas para etalonaje es- en mi opinión- Da Vinci Resolve de Blackmagic Design. Los resultados son espectaculares, aunque tendrás que estudiarlo a fondo, porque el programa es bastante complejo.
Y, por último, rodéate siempre de realizadores que sepan más que tú y mantén los ojos bien abiertos. Es la mejor manera de aprender.